Última milla ¿Qué es y cómo tener éxito?
Última milla
Por estos días, las entregas a domicilio de los negocios han aumentado y seguirán aumentando considerablemente. Esto volvió ineficiente muchos procesos de distribución tradicionales. Para permanecer competitiva, toda empresa depende de una buena gestión de la ultima milla.
Te preguntas ¿de qué estamos hablando? De los procesos y herramientas que permiten que todos los pedidos sean entregados en tiempo y forma a los clientes. Una de las principales necesidades de toda empresa.
¿Qué es la gestión de última milla?
En el mundo de la logística, el término “última milla” representa la última parte del proceso de entrega de un pedido. Es decir, cuando el producto es derivado hacia el cliente final. Son las acciones que transcurren desde que el paquete deja el punto de distribución hasta llegar a las manos del consumidor.
Quienes manejan una empresa o negocio, ya sea pequeño, saben que la gestión de la última milla no es un proceso simple. Se deben considerar puntos importantes como la eficiencia y los costos a mediano y largo plazo. Estos son factores clave para el éxito de un negocio.
Por lo general, la última parte del proceso de distribución tiene lugar en ciudades. Allí confluyen aspectos que vuelven el proceso más difícil. Hablamos, por ejemplo, del tráfico, o las restricciones de circulación urbana.
Otro factor fundamental es la organización de las cargas a entregar. Las unidades de transporte poseen una carga máxima que muchas veces no se aprovecha eficientemente. Esto se debe a una mala planificación de la relación entre la carga y las rutas.
Para ser más competitivo, todo negocio necesita darle eficiencia a su logística de entregas. Además, es crucial tener control sobre los repartidores y notificarle al cliente el estatus de su pedido en tiempo real. Pero, sin dudas, el primer paso es organizar rutas de reparto.
¿Por qué es importante la gestión de la última milla?
Según la revista semana: en su artículo cuestión de costos, En Colombia, los principales factores que conforman el costo logístico en las empresas corresponden al almacenamiento (46,5%), transporte (35,2%), administración y servicio al cliente (11,1%) y otros costos 7,3%.
Estos datos muestran por qué es tan importante una adecuada gestión de la última milla. Si la distribución no está correctamente planificada, se da un incremento en el consumo de los recursos. Existe un mayor gasto de combustible, hay plazos más largos de entregas, mayor desgaste en los vehículos, entre otros.
Todos estos recursos deben ser optimizados para conseguir un negocio más competitivo y rentable. Un proceso logístico deficiente provoca un serio riesgo de perder a los clientes. Para evitar este escenario, lo más recomendable es considerar cómo optimizar el proceso de distribución y las rutas de reparto.
Experiencia del cliente
Cuando los productos que compra son entregados en tiempo y forma, el cliente tiene una experiencia satisfactoria. Esto lo predispone a permanecer fiel a la marca, y seguir comprando en el futuro. Las experiencias negativas generan el efecto contrario, y eso es lo que todo negocio debe evitar para no perder a sus clientes.
El éxito de cualquier negocio depende, en gran medida, de darle a sus clientes una buena experiencia de compra y recepción de sus productos. Además, es fundamental que la distribución de las entregas sea organizada mediante un sistema que optimice los recursos.
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